Algunos padres consideran que el aprendizaje de un segundo
idioma puede representar un freno e incluso un retraso en el desarrollo
lingüístico del niño, aunque no existen pruebas concretas a respeto. Alguna que
otra vez, el niño podrá mezclar alguna que otra palabra entre los dos idiomas,
pero esos casos son normales al principio, principalmente cuando los idiomas
presentan palabras semejantes. Sin embargo, esos pequeños fallos suelen
desaparecer con el tiempo.
El éxito de aprender
dos idiomas para los niños:
Según algunos
investigadores, los niños expuestos desde muy temprano a dos lenguas, crecen
como se tuviesen dos seres monolingües alojados dentro de su cerebro. Cuando
dos idiomas están bien equilibrados, los niños bilingües tienen ventaja de
pensamiento sobre niños monolingües, lo que quiere decir que el bilingüismo
tiene efectos positivos en la inteligencia y en otros aspectos de la vida del
niño. El aprendizaje de dos lenguas a la vez no representa ningún tipo de
contaminación lingüística ni retraso en el aprendizaje. Los expertos coinciden
al afirmar que es mucho mejor el aprendizaje precoz, es decir, hablar a los
niños ambos idiomas desde su nacimiento, pues permite el dominio completo de
ambas lenguas, al contrario de lo que sucede si se enseña la segunda lengua a
partir de los tres años de edad.
Equilibrio entre dos
lenguas o idiomas:
Algunos expertos
sostienen que los niños expuestos a varios idiomas son más creativos y
desarrollan mejor las habilidades de resolución de problemas. Hablar un segundo
idioma, aunque sólo sea durante los primeros años de vida del niño, le ayudará
a programar los circuitos cerebrales para que le sea más fácil aprender nuevos
idiomas en un futuro. La introducción del bilingüismo en la educación de los
niños debe hacerse de forma natural.
Nunca se debe obligar
al niño a hablarlo. Lo importante, al principio, es que el niño lo escuche
siempre y se familiarice con él poco a poco, sin prisas ni obligaciones. No
obstante, existen algunos científicos que recomiendan que el niño aprenda una
segunda lengua solo cuando tenga suficiente conocimiento de la materna.
1. Comunicación:
La capacidad de comunicación con personas de distintas nacionalidades cuando
viajan o conviven con personas extranjeras. Los niños bilingües tienen doble
capacidad para leer y escribir en dos idiomas distintos y, por tanto, su
conocimiento puede ser más amplio por su mayor acceso a la información global.
2. Cultural: El
acceso a dos culturas diferentes enriquece la educación del niño (literatura,
historia, comportamientos, tradiciones, conversaciones, medios de comunicación,
etc.).
3. Conocimiento:
El acceso a la diversidad estimula la capacidad de desarrollo intelectual de un
niño bilingüe. Por ello, pueden ser más creativos, más flexibles, y adquirir
una mente más abierta al mundo y a los demás.
4. Oportunidades de
trabajo: Las puertas del mercado de trabajo se abrirán y ofrecerán más
oportunidades a las personas bilingües.